lunes, 15 de octubre de 2012

Básicamente escritura automática.

Tengo mi blog abandonado, como mi mente, mis pensamientos, TODO.
Todo abandonado al destino, exista o no, todo dejado en el aire, flotando sin más, sin tocar nada, y que así nada se pueda dañar.
Todo y nada la mismo tiempo, un infinito de misterios, un infinito de curiosidades imposibles.
Un infinito en todos los sentidos.
Viviendo sola en el mundo, sin apoyo ninguno, flotando en la nada, respirando constantes mentiras, hipocresías, mierdas y mierdas que flotan sin más de un lugar a otro.
Tener ilusiones y que ráfagas de aire las apague.
Estar superdepre y que el viento te levante.
Todo, la vida, es un puñetero sueño del que no te puedes levantar.
Es el típico sueño en el que sueñas que corres sin más pero no avanzas, no consigues llegar al final.
Jamás acaba.
Dicen que acaba, pero nadie, desde su experiencia, te lo puede contar.
Así que es como si no terminara.
Tu vida termina para otros pero y para ti?
Acaso acaba?
Y si no acaba?
Y si te toca ser el único que jamás va a morir?
Por qué sabes que mueres? Porque otros murieron anteriormente?
Y si estás destinado a vivir eternamente en este sueño sin fin?
En este sueño en el que corres más que otros, sufres por correr así y ver como llega el momento en el que aquellos que se pararon pasaron de todo, como esos son llevados en carromato hasta lo alto del podio sin hacer absolutamente nada.
Y contemplar como lo más alto está lleno de borregos y a ti te echan de allí. por no ser borrego, por querer hacer algo más que tumbarte a dormir como la liebre.
Por ser constante como esa tortuga.
Dicen y repiten que al final del esfuerzo llega la recompensa. . . pero yo no la veo llegar. . .
Dicen tantas cosas y corres tanto para llegar. . . Pero adónde? A dónde quiero llegar??
A morirme?
Si supuestamente es ahí donde voy a llegar para qué debo pasar todas las mierdas del camino si lo que cuenta es el final??
Tengo claras mis ideas y voy a encontrar mi misión en la Tierra  que es para lo que estoy dentro de toda esta maraña de problemas.
Encontraré mi misión la cumpliré y algún día me marcharé.
Me marcharé a mi mundo, donde ningún besugo se dedique a clavarme espinas para prohibir mi caminar.
Y mientras aquí en la Tierra conviviré con los humanos.
Con los realmente dotados de razón y los que la utilizan.
Al resto. . . realmente pueden irse bien lejos que no son más que simios capacitados para hablar como loros y repetir las cosas sin más.
Porque soy un punto en este universo, un punto con una misión, un mísero punto en el infinito pero un punto esencial.
Soy como el número π, quizás no tan famosa, pero esencial.
Seguro que soy esencial y necesaria, si no
Por qué estaría aquí?
Para completar el total de besugos?
NO, NO, porque a mi nadie me ha llevado en carromato, a mi me dejan sufriendo, viendome correr y a lo que se limitan es a mirarme con envidia e insultarme a la vez.
NO, NO, que no se equivoque nadie, no dependo de nadie, soy un caminante solitario, una poeta fuera de época, un alma incomprendida, una idea indeterminada, una íntima amiga de la soledad, pero JAMÁS una pieza de ningún juego. Porque nadie por azar, por lanzar dos malditos dados me va a cambiar o me va a mover.
Porque soy yo, y soy lo suficiente orgullosa como para dejar que nadie juegue mi vida por mi.


  Corre, corre sin más, 
para no ser otro del montón con el que juegan sin cesar. . .


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