viernes, 12 de julio de 2013

Happy 17

Pasan los segundos, los minutos, las horas, los días, los meses, los años, los lustros, las décadas, básicamente pasa el tiempo, y pasa más rápido de lo que nuestros ojos son capaces de apreciar.
Hoy oficialmente ya tengo una década un lustro y dos años... y bueno me siento como si fuese la misma que hace años.. sin embargo las pruebas del pasado me enseñan que no es más que una oscura apariencia y percepción, ya no soy la que era ayer ni mañana seré la que soy hoy, aunque me sienta la misma. La vida es así. Cuando eres pequeña quieres ser grande y que el tiempo pase muy rápido, pero cuando ya empiezas a correr en la misma dirección que el tiempo.. deseas con toda tu alma ir en contra de este, pero no se puede. Así que solo te queda mirar al frente acarrear con lo que has hecho y con lo que harás y seguir caminando, mirando siempre al frente y sobretodo disfrutando al máximo, porque el tiempo corre muy rápido.
Así que con ya 17 años, aquí, sentada en el sofá con mi pierna "tatuada" sonriente y esperando que a partir de ahora las cosas vayan de mejor a muchísimo mejor escribo mi quincuagésima octava entrada en este blog que no es más que un espejo de mi alma.



jueves, 4 de julio de 2013

Los recuerdos son una vaga distorsión de nuestro pasado

Y cuando por algún casual miras al pasado, tanto en fotos, vídeos, dibujos, cartas....
Ves cosas que ya pasaron hace mucho, hace poco o hace nada, pero todo es tan inmenso,
todo tan cambiado, tan diferente, tan igual que en el momento.
Te ves diferente, inmadura, débil, fuerte, pasota y entregada, ves como tu cambio pasó de la noche a la mañana, ves como todos se han transformado, pero en el fondo muy al fondo puedes comprobar como siguen siendo la misma gente. Hay algunos que perduran, otros que se marcharon por el horizonte, otros a los que echaste, otros que te invitaron a salir de sus vidas sutilmente. Cambia la gente, otra permanece, y todos juntos cambiamos continuamente. A esa persona que ves hoy no es la misma de mañana ni la que ayer, va cambiando poco a poco. Hace cosas de las que se arrepiente, cosas que le duelen en el alma, cosas inevitables, daños que no pudo esquivar, pero eso la encamina hacia enderezarse completamente, y crecer hacia lo alto, volar como un pájaro para jamás volverá a caer.
Pero aún así está bien tener guardado ese recuerdo del pasado, donde te percatas de lo mucho que has cambiado, sin darte cuenta esa pequeña larva, gusano, se va convirtiendo en mariposa a lo largo de los años. Lo siente mucho por todos esos hilos de seda que la ayudaron a crecer, pero era inevitable romperlos para poder volver a nacer.