lunes, 28 de octubre de 2013

La verdadera historia de Pirámides

Hoy escribo sin inspiración propia, inspiración robada, prestada.
Vengo de pirata del parche que realmente es buena persona y usa su garfio para secar embutidos.
Y sé que no soy del malo ya que no me atribuyo esta obra, sin embargo era de mención y de expansión al resto de los vivientes.
Es el alma robada de una poeta encerrada, es la esencia del aburrimiento, la mezcla perfecta, es la verdadera historia, es la más sincera.

La triste historia de Parmenidesito

Erase una vez, un niño llamado Parmenides.
Su madre le odiaba a muerte porque era el hijo del butanero,
y el marido le dejó por eso (porque le sentaba fatal el naranja), 
así que como venganza le puso un nombre ridículo,
para que todos se metiesen con él en el cole.
El pobre niño estaba obsesionado con el verbo ser 
(porque no sabía si era una pirámide)
y como todos se metían con él, empezó a drogarse.

Veía cosas raras: a su amado verbo ser, que solo era uno 
y que no tenía ni principio ni final,
y como al drogarse se le pasaban las horas volando 
(literalmente veía las horas pasar en escoba frente a él) 
pues dijo que no existía el cambio, ya que no pasaba el tiempo para él.
Y porque le caía mal su primo Cambio.

Así que al pobre lo marginaron todos, 
pero como era tan cabezón dijo que había sido él,
y que el resto eran unos ajquerosos (con j y todo)
Y murió más solo que la una, aplastado por un meteorito
pero con su amado ser único de compañía.

@Carla_Belest         





sábado, 12 de octubre de 2013

Peleeeeaaa

Una lucha continua
Un mano a mano descarado
Un enfrentamiento entre dos bandos
Como en todos los cuentos: los buenos y los malos
luchan y mueren,
traen refuerzos y unos acaban con los otros
los otros con los unos 
y la lucha perdura 
Se intuye el final
pero no se sabe seguro
por ahora los malos van ganado,
no salgo, duermo, toso 
y dejo que cada cual haga su trabajo 
esperando al día en que acaben con los extraños.